Precision™ Acero para hornear
Anova Precision™ Acero para hornear
Steel the show.
Este acero para hornear ha sido diseñado específicamente para encajar perfectamente en el interior del Anova Precision™ Oven, proporcionando la superficie de cocción más sólida del horno.
Se trata de una herramienta fundamental para almacenar y transferir grandes cantidades de calor, de forma rápida y uniforme, a cualquier alimento que se esté cocinando, especialmente útil para obtener resultados excelentes al cocinar panes artesanales, pizzas y similares.
Hecho a medida para el Anova Precision™ Oven.
Este acero para hornear ha sido diseñado específicamente para encajar perfectamente en el interior del Anova Precision™ Oven, proporcionando la superficie de cocción más sólida del horno.
Se trata de una herramienta fundamental para almacenar y transferir grandes cantidades de calor, de forma rápida y uniforme, a cualquier alimento que se esté cocinando, especialmente útil para obtener resultados excelentes al cocinar panes artesanales, pizzas y similares.
¿Por qué acero?
El acero es pesado, y en el juego de suministrar calor rápido, la masa importa. Piense en el acero como si fuera una gran batería de calor: cárguela precalentando el horno y deje que las 13,6 libras de acero absorban toda esa energía térmica. Cuanto más masiva sea la batería, más energía podrá almacenar y más tiempo podrá pasar liberando ese calor en el fondo de la masa de pizza o de un gran pan artesano de masa madre.
Por último, el acero es prácticamente indestructible. Cualquiera que haya roto una piedra de hornear en su horno entiende el valor de la durabilidad.
Pizza perfecta, siempre.
Las pizzas napolitanas (de masa fina) son mejores cuando se hornean rápido. De hecho, una verdadera pizza napolitana debe hornearse en 60-90 segundos a una temperatura de 905°F. Por desgracia, los hornos domésticos no alcanzan esa temperatura. Entonces, ¿cómo se puede suministrar tanta energía calorífica en el mismo tiempo, pero a una temperatura más baja (más segura)?
La respuesta está en la conductividad térmica. La conductividad térmica mide la velocidad con la que un material libera energía térmica. Y en el caso del acero, es rapidísima: unas 18 veces más rápida que la conductividad térmica de una piedra de hornear. A una temperatura de 480 °F, el acero para hornear libera tanto calor como una piedra de hornear a la temperatura de un horno de leña.
Prácticamente indestructible.
¿Alguna vez se ha roto una piedra de hornear? Es casi demasiado fácil. Las piedras de hornear no sólo son demasiado frágiles para sobrevivir a una caída corta al suelo de la cocina, sino que simplemente no pueden soportar el choque térmico. En cambio, el acero es prácticamente indestructible. Esta losa de 1/4″ de espesor y 13,6 lb de acero macizo fabricado en Estados Unidos durará fácilmente durante generaciones, sin importar lo fuerte que cocine sus pizzas.